sábado, 15 de junio de 2013
Por si la luna
La luna me causaba miedo. A él le daba placer. Decía que cuando la luna brillaba me deseaba más. A mí, cuando se llenaba, me daban ganas de llorar. Casi como ahora…
Anoche también había luna. Quiso enredarse conmigo. Quería sexo, descubrirse el cuerpo y hasta el alma, según él. Algo ocurrió. Me tomó a la fuerza. Ni siquiera la vi. Sólo sentía mucho temor. Y lloraba.
Al final creo que él también lloró. Quedó tendido en la calle. Miraba a la luna. Y a mí el miedo se me quitó.
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Muy buen relato!
ResponderEliminarhttp://transitandorecuerdos.blogspot.com/
Si quieres entra es un blog mío en donde escribo, y quisiera saber tu opinion. Desde ya muchas gracias
Dulzaino.
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