viernes, 1 de mayo de 2009

Igual

Y cuando se dio cuenta ahí estaba de nuevo amarrada a él. Ni siquiera le habia dicho adiós o que ya no, simplemente se había alejado sin explicaciones ni canciones de despedida. Sólo fue que un día ya no contestó al teléfono ni la llamó. Ya no se asomó por la ventana para verla pasar. Pero lo había hecho antes, dos o tres veces. Y lo hacía de nuevo. Ella se juró no volver a llorarlo, ni a pensarlo, ni a decir todas las palabras cursis que se dicen cuando se acaba la miel. Pero una sola carcajada, una sola canción, una sola mirada y se fue de nuevo al pasado. Y cuando se dio cuenta ya estaba de nuevo sintiendo tanto por él. Sola. Igual.

.

3 comentarios:

  1. Hola Flora Isela!

    Me gusto mucho tu texto, me recuerda lo dependiente que suelo ser a veces -y que ya se me está quitando, jeje-, aunque a veces tengo el miedo infantil de que, al adquirir fortaleza, pierda sensibilidad... y el poco toque que tengo para escribir!

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Qué bueno... Igual me gustó. Me recuerda que las personas somos lo que somos y cambiamos muy poco.

    Besoss

    ResponderEliminar
  3. Se me puso la piel de gallina!
    He tratado por todos los medios de no volver al pasado...
    Como lo logro? no lo se aun, pero si se que lo conseguire ;)

    ResponderEliminar

Chihuahua en video